Siglos XV · XVI
La tradición islámica
os testimonios más antiguos - conocidos - del uso del azulejo en el revestimiento monumental de paredes entronca con la tradición decorativa hispanomorisca. Fueron azulejos importados de Sevilla alrededor de 1503.
La presencia árabe en la Península Ibérica dejó una marca duradera en la cerámica. Sevilla, hasta mediados del siglo XVI, sería el mayor centro productor de azulejos, elaborados siguiendo técnicas arcaicas, como la decoración a cuerda seca y a cuenca (o arista).
Los motivos decorativos evolucionaron desde las filigranas y los encadenados geométricos moriscos hacia temas vegetales y animales, más próximos a la tradición europea. Nos encontramos en la transición entre el gusto gótico y el más puramente renacentista.
En Portugal, sin embargo, parece como si la influencia morisca se hubiese prolongado durante más tiempo, no tanto por el estancamiento de los temas tratados como por la insistencia en cierto exceso en el revestimiento decorativo de los espacios, una suerte de horror al vacío.

Catedral de Coímbra, principios del siglo XVI.
fotografía: Paulo Cintra y Laura Castro Caldas

Esfera armilar,
Palacio Nacional deSintra,
ca. 1500.
fotografía: Nicolas Lemonnier
Frontal de altar,
Palacio Nacional de Sintra,
ca. 1500.
fotografía: Nicolas Lemonnier
Convento de la Concepción,Sala del Capítulo, Beja.
1.er cuartodel siglo XVI.
fotografía: Paulo Cintra y Laura Castro Caldas
© Instituto Camões, 2000